El lugar

---------- Mensaje reenviado ----------
De: Castrato
Fecha: 2 de agosto de 2011 23:25
Asunto: Desde el fin del mundo.
Para: Peter Lorre

El aire es punzante, la nieve está por todos lados blanca o derretida formando un barro eterno sobre calles, veredas plazas. Sin embargo hay vida, sí, increiblemente en una ciudad de sesenta mil habitantes hay algo que se parece a un poema. Siempre me gustó el invierno, pero acá alcanza su perfecta poesía.

Estoy en Ushuaia, a 3070 kilometros de Buenos Aires, desde hace tres días. Es incomparable caminar frente al Canal de Beagle, sentarse en una placita solitaria llena de hielo y sentir que la próxima persona que va a pasar sola (es raro ver grupos), ni se inmuta, lleva consigo toda la soledad, todos los zapatos embarrados de miles de años.

Estoy en el Fin Del Mundo, en un lugar donde al mirar al norte lo único que queda atrás es tu espalda. Dicen que a 800 kilómetros está la Antártida y sin viento, sin ruidos y con el carácter rudo de hombres y mujeres que no saben de aflojar, en rara simbiosis con el habitat, sin quejas, sin llantos, con la humanidad que otorga el vivir aislado de un mundo de asco y miedo.

Desde Ushuaia, un gran abrazo.

Castrato

Castrato: siempre es bueno saber de Ud., desde donde se encuentre su alma errante. Disculpas por publicar su mensaje aquí, pero me pareció digno de trasladarlo a este ámbito, que también es el suyo. Respire toda esa nieve, esa soledad, ese barro y ese silencio. Difícil imaginar un lugar más perfecto para zafar de la grasa dominante. Acá y en cualquier parte. Abrazo, PL.