De un artículo de Sandino Núñez en
Tiempo de Crítica, reproducido
acá:
El biopoder procede creando el horror a la
anomalía, y luego realiza actos de gobierno (como legislar o normar, por
ejemplo) siempre en nombre de ese horror y de un posible exorcismo o de un
conjuro repelente del objeto parcial horroroso. El biopoder está ahí para
defender mi cuerpo y mi vida biológica, y el precio que pago por eso es,
precisamente, mi muerte como sujeto político, mi entrega pasiva a manos de los
expertos, mi infantilización radical y extrema. El Estado es mi pediatra.
Homosexualidad y sus leyes.
ResponderEliminarAborto y sus leyes.
Matrimonio gay y sus leyes.
Adopción y sus leyes.
Tabaco y sus leyes.
Alcohol y sus leyes.
Marihuana y sus leyes.
Pasta base y sus leyes.
Eutanasia y sus leyes.
Donante y sus leyes.
Abuso sexual y sus leyes.
Capacidades diferentes y sus leyes.
El espacio y sus leyes.
ResponderEliminarEl tiempo y sus leyes.
El sonido y sus leyes.
La acción y sus leyes.
El relato y sus leyes.
El cine y sus leyes.
El arte y sus leyes.