Sigo el laberinto y me encuentro. Me encuentro en Nathaniel Hawthorne (Otras Inquisiciones 1952). Debe ser la máxima expresión de gusto por la literatura, esa que Borges define como un sueño, un sueño dirigido....¨Nada nos veda imaginar que murió soñando y hasta podemos inventar la historia que soñaba- la última de una serie infinita- y de qué manera la coronó o la borró la muerte. Algún día la escribiré (la muerte de Hawthorne) y trataré de rescatar con un cuento aceptable esta deficiente y harto digresiva lección¨. Ginebra, 14 de junio de 1986. Veinticinco años con Borges.
Sigo el laberinto y me encuentro. Me encuentro en Nathaniel Hawthorne (Otras Inquisiciones 1952). Debe ser la máxima expresión de gusto por la literatura, esa que Borges define como un sueño, un sueño dirigido....¨Nada nos veda imaginar que murió soñando y hasta podemos inventar la historia que soñaba- la última de una serie infinita- y de qué manera la coronó o la borró la muerte. Algún día la escribiré (la muerte de Hawthorne) y trataré de rescatar con un cuento aceptable esta deficiente y harto digresiva lección¨. Ginebra, 14 de junio de 1986. Veinticinco años con Borges.
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