BRANKA BOGAVAC LE COMPTE: ¿Estaba Dostoyevski obsesionado por el demonio?
EMILE CIORAN: Sí, más que los demás. Conozco a Dostoyevski muy bien. Me ha gustado muchísimo, es una de las pasiones de mi vida. Tal vez sea el escritor más profundo, más complicado de todos los tiempos. Lo coloco por delante de todo el mundo, con defectos enormes, pero con resplandores de santidad.
BBLC.: ¿Lo coloca usted por delante incluso de Shakespeare?
EC.: Sí, incluso por delante de Shakespeare. Dostoyevski es el escritor que más me ha impresionado, el que fue más lejos en el examen del hombre, el que supo explotar el mal y el bien. Abordó con la mayor profundidad el mal, como esencia del hombre, pero al mismo tiempo la inspiración es doble en él. Para mí, Dostoyevski es el escritor.
BBLC.: Usted dice que el escritor escribe siempre sobre sí mismo. ¿Cómo pudo él encontrar todo eso en sí mismo?
EC.: Porque sufrió mucho, lo dice él mismo. Eso es el conocimiento. Por el sufrimiento y no por la lectura es como se adquiere. En la lectura, hay como una distancia. La vida es la verdadera experiencia: todos los fracasos se pueden sufrir, las reflexiones que de ellos se desprenden. Todo lo que no es experiencia interior no es profundo. Puedes leer miles de libros, pero no serán una verdadera escuela, al contrario de la experiencia de la desdicha, que todo lo que te afecta profundamente. La vida de Dostoyevski fue un infierno. Vivió todas las adversidades, todas las tensiones. Seguramente es el escritor más profundo en las experiencias interiores. Fue hasta el límite extremo.
-EMILE CIORAN, Conversaciones, Tusquets, Barcelona, 1996, pág. 209.
No hay comentarios:
Publicar un comentario