España, dicen, es el destino preferido de los uruguayos en apuros. Para Isabel, la protagonista de Hispania Help, sin duda lo es: después de una crisis laboral y de la muerte de sus padres, ella busca huir a una España vista como un horizonte de salvación en el que todos los problemas se resuelven. La novela es entonces la narración de lo que le pasa a Isabel –-y también de lo que ella sueña e imagina– mientras junta la plata para tomarse el barco. Pero eso es solo en la superficie. Con el correr de las páginas, además, Hispania Help se convierte en un mundo bizarro compuesto de una mezcla ingeniosa entre realidad y fantasía.
Luego de ser despedida de la Zapatería Cristal y de abandonar su carrera como crítica literaria en el diario amarillista El profetón, Isabel empieza a trabajar en SPI, Sociedad de Poetas Inciertos, organismo que paga en dólares a sus integrantes por dedicarse a defenestrar a poetas consagrados. La identidad de los miembros de SPI es secreta: cada uno debe hacerse llamar por el nombre de un poeta. La elección del nombre no debe justificarse con la grandeza literaria del elegido sino explicando cómo el escritor en cuestión “se cagó la vida con la literatura y de paso la de sus lectores”. En ese contexto, la escritura es consecuencia necesaria del fracaso y también su causa: Isabel escribe relatos eróticos que ni siquiera a ella la erotizan.
Mientras tanto, en un mundo de fantasía ridículamente glamoroso, ella participa de la dirección y el rodaje de Hispania Help, un film imaginario de David Lynch que tiene a su fracasada vida como eje del argumento. Según el propio Lynch imaginario, la película en curso no se rige por las reglas de la verosimilitud. Como tampoco lo hace la novela de Estramil.
Ante la negatividad casi insoportable que significaría reconocer el propio fracaso, la protagonista de Hispania Help es inesperadamente capaz de reír frente al espejo. En poco más de cien páginas la novela recorre todos los tipos de humor imaginables: desde la risa patética de un personaje que se burla de su propia desgracia hasta la sonrisa por detrás de la cual se esconde una tristeza oscura, pasando por una carcajada irreverente que no tiene compasión por nada ni nadie. En la segunda novela de Estramil, además, hay una lágrima escondida que corre por detrás de la página.
Ganadora del Premio Banda Oriental por su primera novela, Rojo, en Hispania Help Estramil no deja títere con cabeza. Al mismo tiempo que falta el respeto a poetas y escritores canónicos, Isabel se pasa toda la novela haciendo una glorificación superficial y cómica de J. K. Rowling. No falta tampoco una burla al mundo de la crítica literaria ni una sátira al mismísimo David Lynch y su público.
La historia que cuenta Hispania Help, a la manera de Copi, se construye con una acumulación casi indiscriminada de elementos, personajes y episodios. La aceleración del libro es incontenible: a medida que se avanza en la historia suceden cada vez más cosas, más inconexas y absurdas, en menos líneas. Pero con la agilidad y la precisión que exhibe Estramil, la novela –el delirio– se cierra en el momento justo. No sobra una palabra.
habrá que leer la novela de esta piba compatriota, pues....
ResponderEliminarLe aseguro que es una bomba, Lajack. El libro y la piba también.
ResponderEliminarJuaaaa!!! Quién será esa mujer que no deja títere con cabeza! Quisiera conocerla!
ResponderEliminarYo la leí y se las recomiendo! tiene muchas virtudes y una soberana : no aburre! es decir no parece uruguaya!
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